POEMAS BREVES
Un año más, un año menos.
Tras poco día, noche vieja:
Tu filo, San Silvestre. Henos
con la amenaza que no ceja.
(Jorge Guillén. Clamor).
El verano abre las ventanas.
Cuartos en su luz encendida.
Más estrellas menos lejanas.
(Jorge Guillén. Clamor).
Soledad de la cañada.
La mujer es la que pierde,
que el hombre no pierde nada.
(Popular)
Tu calle ya no es tu calle
que es una calle cualquiera
camino de cualquier parte.
(Manuel Machado)
A mi puerta has de llamar
y no te he de salir a abrir
y me has de sentir llorar.
(Popular)
Na rua do meu amor
nao se pode namorar:
de dia, velhas ás portas;
de noite, caes a ladrar.
(Popular)
La campana en el campanario;
el mochuelo en el olivo:
la pena en mi corazón...
Cada cosa está en su sitio.
(Popular)
Abril. Muere mi madre.
¡Qué triste es para mí
cambiar de vestido!
(Haiku)
Sobre esta misma almohada
me acompañó su cabeza.
Sé ya ahora cómo empieza
la blancura de la nada.
me acompañó su cabeza.
Sé ya ahora cómo empieza
la blancura de la nada.
(J. Guillén)
Miedo infantil, amor adolescente,
¡cuánto esta luz de
otoño os hermosea!
¡Agrios caminos de la vida fea,
que también os doráis al sol poniente!
(A. Machado)
Lámparas
que se apagan,
esperanzas
que se encienden.
Aurora.
Lámparas que se encienden,
esperanzas
que se apagan. Noche.
(Omar
Ibn Ibrahim Khayyam)
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